El Decano perdió sin paliativos ante el que hasta entonces era el farolillo rojo de la competición por 2 - 0 en un partidos donde los azulillos realizaron un juego apático, sin mordiente y que finalmente se declinó a favor de los locales que supieron aprovechar al máximo su dos ocasiones claras del partido.

Los dos equipos volvían a verse las caras 37 años después en un partido donde los locales necesitaban imperiosamente sacar algo positivo ya que hasta el momento no habían conseguido obtener ningún punto en su casillero tras disputarse cuatro jornadas de liga.

Con un juego poco vistoso por los visitante, era cuestión de tiempo que los locales aprovecharon su ocasión y esta llegó poco antes de la media hora de juego tras un error garrafal de la defensa cuando Gutiérrez adelantaba a los locales ante la incredulidad azulilla.

Con el resultado en contra y tras la expulsión de José Márquez por protestar el Alhaurino intentó llegar al descanso con al menos un gol en el marcador pero los locales aupados por el tanto estuvo más metido en el juego y evitó el tanto azulillo.

Ya en la segunda mitad, con un Alhaurino más metido en el partido acorraló a los locales tras un inicio rápido en busca del ansiado gol, pero este finalmente recaería a favor de la UD Pavía que supo aguantar y esperar su oportunidad para que Acién pusiera la puntilla definitiva a los visitantes.

De ahí al final, el Alhaurino lo intentó pero con un juego apático y sin nada de mordiente que deja al Decano en la zona peligrosa de la tabla clasificatoria con tan sólo 6 puntos y a 7 del primer clasificado, números muy negativos si el conjunto de Alhaurín el Grande quiere optar a ocupar uno de los puestos que le de el retorno a la tercera división la próxima temporada.